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| @ MIGUEL RUBIO |
Y yo os digo,
que la espuma del mar
invadirá la tierra
y subirá a los montes.
Que llegará hasta las nubes
mezcládose con ellas.
Y lloverá agua salada,
convirtendo en yermos
los campos de cultivo.
Ese día, el padre sacrificará
a su hijos mas pequeños,
para dar de comer a los grandes.
Y las madres matarán
a sus hijas recien nacidas,
antes que léntamente
entre miseria y dolor,
se mueran de hambre.
Yo os digo,
que las montañas
se convertirán en volcanes,
sus cenizas cubrirán la Tierra
y la superficie de lava,
hará subir sin remedio
la altura de los mares.
El océano se internará
continentes adentro,
haciendo que los tiburones
se coman a los perros.
Las urbes desaparecerán,
asoladas por el embate brutal
de una cortina de agua,
semejante a un puño de acero.
La lluvia será de sangre,
El trueno,será el eco de otro trueno,
en un rosario de explosiones,
en que destacará el rojo de los relámpagos
y el láser de los rayos vertebrados,
en un cielo de color negro
Y yo os digo,
que ya nada será igual
para los hombres y mujeres
que queden vivos.
Por milésima vez,
en un círculo cíclico,
Dios,seguirá usando al ser humano
como una cobaya de científico
y la Tierra un laboratorio,
donde jugar con los hombres,
hasta que aburrido,
se vaya a sus cosas de dioses.
Y yo os digo,
que nos dejará de nuevo desamparados,
a merced del suyo y solo suyo, libre albedrío.
El ser humano es una marioneta,
una sombra de sombre china,
la muñeca de trapo o madera,
manejada con falsos hilos divinos.
Miguel rubio DAR.(El Faraón ateo) 2011

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